Columna publicada en la edición Nº 24 del Observatorio Sur de la Corporación Proyectamérica.
Cuando se hace referencia a la actividad política, una asociación inmediata apunta naturalmente a los partidos y a los discursos que de ellos emanan. Internarse en el terreno de los patrones de funcionamiento de las elites políticas constituye un campo difícil de dilucidar y arriesgado, básicamente porque los códigos de desenvolvimiento de este tipo de estamento son implícitos y prima un cierto espíritu de cuerpo, refractario al escrutinio externo. Leer más